¿Cómo se fija el precio del arriendo de retroexcavadoras?
El arriendo de retroexcavadoras es uno de los negocios más importantes en el ámbito de la construcción. Gracias a ello, muchas compañías pueden llevar a cabo sus obras, reduciendo notablemente la inversión que realizan en maquinaria pesada.
En este sentido, en la construcción es necesario cuidar los costos de inversión, puesto que de ello depende el valor final de las obras. Un inmueble demasiado caro no será la primera opción de la mayoría los clientes, y si es muy económico, puede representar pérdidas para el empresario o significar un resultado de deficiente calidad.
En virtud de ello, es esencial conocer cuáles son elementos que se tienen en cuenta en la determinación del precio del arriendo de retroexcavadoras, compactadores, elevadores y demás maquinaria pesada.
En el caso de las retroexcavadoras, la mayoría de las empresas arrendadoras de dichos equipos, fijan el valor del alquiler por hora. Sin embargo, algunas calculan la duración de una jornada de trabajo y en función de ello determinan el costo por día.
Por tanto, tenemos que evaluar cuál es la modalidad que mejor se adapta al ritmo de trabajo. Así mismo, es imperativo ser eficientes en el desarrollo de las actividades, a fin de arrendarlas por el menor tiempo posible, con ello lograremos evitar gastos excesivos.
Otro de los aspectos que inciden en el costo del arriendo de retroexcavadoras, son los servicios adicionales que se incluyan en el contrato, tales como el combustible, el transporte hasta el lugar de la obra, accesorios y el operario de la misma.
De igual forma, notaremos leves diferencias que obedecen a características propias de la máquina. En este aspecto se incluyen el tamaño, modelo, antigüedad, potencia y marca. También es posible que el arriendo varíe en función del uso que se les vaya a dar.
Si queremos realizar un arriendo eficiente, estos serán los criterios que debemos tener presente a la hora de hacer el presupuesto. Como dato extra, recordemos que una vez alquiladas, es esencial darles el uso apropiado y evitar someterlas a condiciones que pongan en riesgo su óptimo funcionamiento. Las averías que puedan sufrir, correrán por nuestra cuenta y son un gasto difícil de asumir.