Camareros extras: planificando un festejo
Si queremos organizar un gran evento, inolvidable, es necesario hacer una lista, para no obviar ningún detalle, por pequeño que pudiera parecer. Tomemos un cuaderno y escribamos cada idea: ¿se hará adentro o afuera? ¿Contratamos a una empresa de catering o la familia se encarga? ¿Serán necesarios camareros extras? Y así sucesivamente hasta estar seguros de que hemos cubierto todos los aspectos.
Lo que sucede es que la mente a veces resulta frágil y cuando está saturada tiende a bajar la presión, dejando de lado elementos que podrían al final convertirse en un problema. Por esto lo conveniente es escribirlos y luego en caso de duda solo tenemos que consultar lo registrado.
¿A qué debemos prestar cuidadosa atención al organizar un festejo? En pocas palabras, ¿Cuáles son esos ítems que incluiremos en el mencionado cuaderno? Sin pretender ser exhaustivos, ni asignar ningún tipo de prioridad estos serían:
- ¿Cuántos?: de acuerdo con el presupuesto disponible debemos elegir entre invitar solo a los familiares y amigos cercanos o lanzar una recepción por todo lo alto. Sobre esta base calculamos los camareros requeridos.
- ¿Qué?: habiendo establecido claramente el motivo de la celebración que sería el porqué, queda pendiente determinar si se hará un almuerzo, cena, coctel o fiesta bailable.
- ¿Cómo?: aquí caben preguntas varias, ¿será formal o informal? Esto decide el vestuario a utilizar. La música: ¿grabada o en vivo? ¿con fotógrafo profesional?, etc.
- ¿Dónde?: según el número de invitados decidiremos si el evento se hace en casa o se alquila un salón de fiestas. En el primer caso, ¿usamos el jardín? Esto sería posible en verano, pero en invierno, probablemente, tendría que ser adentro.
- ¿Cuándo?: es importante considerar la disponibilidad de los asistentes, pero además, si pensamos alquilar un local, cuanto más pronto definamos la fecha mejor. Especialmente si estamos en la temporada alta de celebraciones en la ciudad.
Por supuesto, que cada punto podría a su vez ocuparnos varias páginas por el sinnúmero de detalles a cubrir. Por ejemplo, ¿Qué hacen los niños en ese período? O ¿establecemos con claridad que la actividad es solo para adultos? Y hay un sinfín de cosas más que evaluaremos cuidadosamente con objeto de garantizar el éxito y el disfrute de todos, incluyendo el nuestro.