Con un lifting Madrid podrás rejuvenecer tu piel y recuperar de nuevo la belleza
Con el paso del tiempo la piel y los músculos van perdiendo su tonicidad y frescura, sin embargo, hoy en día contamos con el lifting Madrid para mejorar los signos visibles del envejecimiento y recuperar de nuevo la belleza.
Al pasar los años, las arrugas surgen en mayor proporción en las zonas de la boca, nariz, ojos, entre las cejas y los depósitos de grasa del cuello. Sin duda alguna son muy molestas y para ciertas personas pueden representar un verdadero quebradero de cabeza, pues ¿qué mujer quiere perder su belleza y ver su rostro arrugado? ¡Absolutamente ninguna!, independientemente de la edad, todas queremos ser bellas, por eso, el lifting es la mejor alternativa para lograrlo.
¿En qué consiste el lifting Madrid y cómo actúa en el rostro y cuello?
Se caracteriza por ser una intervención que puede aplicarse en forma independiente o como complemento de otros procedimientos o tratamientos como, por ejemplo, la cirugía de párpados.
Según la opinión del especialista puede realizarse con anestesia general o local, e incluso la sedación, esta elección también depende de la cirugía adicional que se vaya a realizar.
Por lo general, el tratamiento del lifting consiste en penetrar las estructuras más profundas de la piel de la cara y el cuello para extirpar la grasa, con esto se detiene el deterioro de la dermis y de su envejecimiento.
Después de la intervención, el cirujano suele aplicar vendajes alrededor de la cabeza para evitar la inflamación y los hematomas, y aunque suele ser un poco dolorosa la recuperación, los pacientes no han manifestado incomodidad después del lifting.
No obstante, en el caso del dolor el médico administra algunos fármacos y recomienda ciertos cuidados cotidianos para lograr el éxito del tratamiento.
Cuidados básicos tras la intervención 
La técnica no actúa por arte de magia sin ayudar al organismo a recuperarse, por esta razón, es imprescindible seguir los siguientes consejos después de optar por este método:
- Utilizar una venda ortopédica y especial durante el tiempo que el especialista recomiende; es preferible solo quitar cuando vaya a lavarse el rostro o el vendaje.
- Dormir con la cabeza un poco inclinada con el refuerzo de una almohada y evitar actividades al menos durante las tres primeras semanas.
- No exponerse al sol.