Cuando son necesarias las pruebas de paternidad
En la actualidad, la mayoría de las personas cuentan con opciones e información para poder planear cómo y cuando formar una familia, algo que es de gran importancia poder brindar a nuestros hijos la calidad de vida que deseamos en función de nuestros planes y proyectos a futuro. Pero en ocasiones surgen situaciones que no estaban planeadas y que es necesario afrontar, como lo es un embarazo no deseado, que algunas veces ocurren de tal forma que surgirán dudas sobre quien puede ser el padre del niño. Para ese tipo de casos ahora existen las pruebas de paternidad que ayudan a aclarar cualquier tipo de duda, para evitar problemas a futuro.
Situaciones como el distanciamiento de la pareja, la falta de confianza o mantener relaciones con mas de una persona, pueden traer como consecuencias embarazos no planeados y generar dudas con respecto a quien es el verdadero padre, estas dudas también pueden surgir tras muchos años de convivencia en pareja y en familia, si hay indicios de que un niño criado como propio pueda no estar realmente conectado por la sangre. Las pruebas de paternidad son un recurso que se utiliza para poder determinar si existe una relación consanguínea entre dos personas, despejando así cualquier tipo de duda que pueda haber al respecto.
En qué casos se solicita una prueba
Son solicitadas especialmente en litigios para reclamar la paternidad de un niño, cuando se ha determinado que existe la posibilidad de que la madre haya tenido relaciones sexuales con el presunto padre y que de ellas haya resultado la concepción de un hijo, pero son también solicitadas en los casos que reclaman lo contrario, es decir, cuando el presunto padre no tiene la certeza real de que un niño sea suyo, puede hacer un reclamo para impugnar su paternidad, al negar su relación biológica con un niño reconocido como propio anteriormente.
La decisión de hacer una prueba de paternidad puede surgir por un reclamo a través de las vías legales, o bien puede ser una elección que se haga de manera personal o en pareja, si hay factores que generan dudas con respecto a la relación biológica de los padres con los hijos. Al hacerlo de manera personal, es decir, sin una orden judicial que lo solicite, la pareja quizá quiera simplemente aclarar alguna duda con respecto a la paternidad de un hijo y tomar la mejor decisión para ellos y el niño en base a eso.
Cuando es un juez quien ordena una prueba de este tipo, las razones pueden ser más complejas, pues tratarse de un padre que no acepta su responsabilidad, o un caso que busque reunir a una persona con su familia biológica. Al ser altamente confiable, es una prueba que permite resolver algunos problemas con mayor facilidad